Ablación endometrial uterina

Ablación endometrial uterina

La ablación del endometrio es un procedimiento poco invasivo que tiene como objetivo eliminar la delgada capa de tejido mucoso que recubre la cavidad uterina. Se prescribe en casos de hemorragias menstruales abundantes o hemorragias uterinas anormales (sangrado entre períodos menstruales).

¿Qué es la ablación endometrial?

La ablación del endometrio uterino es un procedimiento ginecológico en el que se retira el endometrio (la delgada capa de tejido que recubre el útero). Después de la intervención, se reduce la cantidad de sangrado durante la menstruación y disminuyen las hemorragias uterinas.

Normalmente, la ablación se prescribe a mujeres de entre 35 y 45 años. Lo ideal es que la mujer tenga más de 40 años. Después de la menopausia, generalmente no se realiza una ablación debido al riesgo de desarrollar cáncer de útero.

Indicaciones y contraindicaciones

La ablación se prescribe a pacientes que pierden mucha sangre durante la menstruación. Los signos de menstruación abundante son los siguientes:

  • La mujer tiene que cambiar el tampón o la compresa cada hora o dos, o incluso con mayor frecuencia.
  • El sangrado dura más de 8 días.
  • A la mujer se le diagnostica anemia debido a la pérdida de sangre.

Ante menstruaciones abundantes, el médico puede recomendar anticonceptivos orales o un dispositivo intrauterino. Si estos u otros métodos de tratamiento no funcionan, se puede recomendar la ablación del endometrio.

El procedimiento tiene efectos (por ejemplo, reducción de las posibilidades de quedarse embarazada), por lo que hay contraindicaciones para realizarlo:

  • Planificación del embarazo;
  • presencia confirmada de una condición precancerosa del endometrio u oncología uterina mediante estudio histológico;
  • infección o inflamación de los órganos internos de la pelvis;
  • suturas insuficientes;
  • enfermedades de transmisión sexual;
  • enfermedades crónicas en estado agudo;
  • presencia de pólipos del endometrio o miomas.

No se realiza la ablación del endometrio si el grosor de la capa muscular es menor de 1 cm. Por lo general, la intervención puede estar contraindicada si el útero tiene una longitud menor de 4 cm o mayor de 11 cm. Sin embargo, algunas tecnologías modernas permiten realizar la ablación incluso con un útero de hasta 14 cm de longitud.

Riesgos de la operación

Después de la ablación del endometrio, aumenta el riesgo de aborto y disminuye la probabilidad de concepción natural, gestación y parto. Por esta razón, la intervención se prescribe solo en casos extremadamente raros para mujeres en edad fértil.

Si la operación ha llevado a la imposibilidad de concebir, llevar a término o dar a luz a un hijo, la mujer puede recurrir a los servicios de una clínica de reproducción asistida que ofrece gestación subrogada.

Métodos de realización

El endometrio de la cavidad uterina puede ser eliminado mediante los siguientes métodos:

  1. Utilizando láser (método de contacto o no contacto).
  2. Con el uso de un bisturí eléctrico, con formas de bola, rodillo, barril o asa. Este método se considera menos traumático.
  3. Eliminación por ondas de radio, donde los tejidos se vaporizan mediante coagulación instantánea de alta temperatura en seco.
  4. Ablación térmica mediante líquido, donde se elimina una capa de tejido mediante cauterización.
  5. Aplicación de nitrógeno líquido: acción sobre el endometrio con temperaturas bajas.

Para asegurar una visión continua, se utiliza un histeroscopio con cámara y luz, que se introduce en la cavidad uterina.

¿Cómo se lleva a cabo la operación?

Antes de la intervención, se realiza un examen integral a la paciente. El ginecólogo realiza un examen visual en el sillón ginecológico. El diagnóstico también incluye un análisis detallado de sangre y orina, pruebas de enfermedades infecciosas ocultas, frotis vaginal y exámenes instrumentales.

Aunque la intervención es poco invasiva, la mujer puede permanecer en el hospital durante 1-2 días. El momento recomendado para realizar el procedimiento es del 5º al 8º día del ciclo menstrual. Las etapas de la ablación del endometrio son las siguientes:

  1. La mujer se acuesta en la mesa de operaciones o en el sillón ginecológico, según el tipo de ablación.
  2. El médico introduce un espéculo en la vagina y trata el cuello uterino con un antiséptico.
  3. El médico fija el cuello uterino y proporciona acceso libre a la parte interna del órgano.
  4. Se introduce un histeroscopio en el interior del útero.
  5. La cavidad uterina se llena de líquido o gas de dióxido de carbono para mejorar la visión (opcional).
  6. El médico elimina el endometrio.
  7. Se extrae el líquido de la cavidad uterina (si se ha introducido).

Las características del procedimiento pueden variar ligeramente según el tipo de ablación.Se utiliza anestesia general o raquídea, así como analgésicos en el cuello uterino y el útero, según el tipo de ablación. Inmediatamente después del procedimiento, la mujer debe estar bajo supervisión médica. Si no hay complicaciones durante el procedimiento y las primeras horas posteriores a él, la paciente puede irse a casa el mismo día.

Período postoperatorio

En los primeros días después de la ablación del útero, puede haber secreciones sanguinolentas y dolores espasmódicos en la parte inferior del abdomen. Durante 1-2 semanas, puede haber secreciones acuosas del área vaginal.

Al principio, la paciente debe evitar el esfuerzo físico y controlar su estado emocional. Se recomienda agregar más alimentos ricos en vitaminas al menú.

Durante los primeros 2-3 días (o más según las indicaciones del médico), no se deben usar tampones ni tener relaciones sexuales.

Por lo general, la recuperación requiere de 2 a 14 días. La mayoría de las mujeres pueden volver a su rutina habitual entre 1 y 5 días después de la ablación.